sábado, 11 de octubre de 2014

Mexicanos en la ciudad de New York: Entre rabia, llantos y unidad.



El llamado general de desesperacion y apoyo de los familiares de Normalistas desaparecidos en Guerrero , tambien se escucho y toco las conciencias y corazones de nosotros los migrantes mexicanos radicados en la gran Manzana NYC, asi como tambien la de de organizaciones locales estadounidenses grupo internacionalista , freedom socialist party , yo soy 132NY y miembros de otros grupos y colectivos independientes . Esta fue una de las mas significativas y concurridas manifestaciones frente al consulado mexicno en la ciudad de nueva york que se haya protagonizado , pidiendo por la la ivestigacion y presentacion con vida de los normalistas de Ayotzinapa secuestrados por el gobiern de Angel Aguirre en Guerrero .
Entre esta comunidad mexicana que radica en Nueva York tambien hace presencia la guerrerense , y entre uno los manifestantes (que vio la actividad en facebook),se encontraba un padre de uno de los desaparecidos y que al ver la foto de su hijo en una de las pancartas que llebaban los compan’eros , rompio el llanto , senal y signo de que el dolor esta al rojo viovo aqui entre nostros y que no necesitamos ir a mexico para vivirlo, sentirlo , percivirlo. Esa es la indignacion y rabia contra el sistema de un gobierno fallido mexicano un NARCOGOBIERNO que se ha descarado y que usa la violencia y el crimen para intimidar a aquel que levanter la voz , para acallar con terror aquel que se organiza. Las sadicas muestras de terror llegan a su maximo nivel , el dosllamiento de un estudiante activista como ejeplo de lo que le puede pasar a aquel que se rebele a las normas establecidas por este descoyuntado gobierno. El condunte grito frente al consulado mexicano extencion de este NARCOGOBIERNO en Ny “desde nueva york a Ayotzinapa…estamos con ustedes “ “you took them alive we want them back alive “ entre otras consigans llenas de repudio e indignacion .
La participacion de los camaradas que alli hablaron concidian en lo mismo , el rechazo a las aciones de la policia en conjunto con sicarios para perpetrar este crimen y en complicidad con los tres niveles de gobierno , federal ,estatal y municipal.l y el apoyo incondicional a los companeros que sufren alla en guerrero si importer raza , religion o inclinacion politica se identificaron unicamente por el sentimiento de justicia con su gran Corazon y conciencia. Tambien los compass de la campana por la libertad de Nestora Salgado el Freedom Socialist Party mostraron silidaridad y asi mismo participaron con la pancarta de Nestora ya que ella es victim del gobierno repressor de Anggel Aguirre y que a concecunacia a estado encarcelada yap or mas de un an’o bajo acusaciones falasas. Cabe senalar que simpatizantes del EZLN tambien acudieron hacienda eco al llamado de los Zapatistas por medio de un comunicado de solidaridad emitido en la semana y firmado por el subcomandante tacho .
El mundo tiene que saber lo que esta pasando en mexico y por e so unos compatriotas decidieron al finalizar la protesta ,dirigirse a Times Square icono mundial del mundo capitalista y punto clave para mandar un mensaje . Alli tambien se hizo eco de los hechos ocurridos en Ayotzinapan cuando turistas curiosos preguntaban What happening?Se respondia con la respuesta siempre es certera y se les informaba de la situacion que atravieza mexico con estos gobiernos y politicos corrompidos y criminales .

Desde este lado y desde abajo hemos entendido y por experiencia que las televisoras regualres TV Azteva,Univision ,Televisa ,Fox, CNN etc. Solo daran a conocer lo que les convien y por ser complices del sistema asi pues para nosotros han dejado de ser el opcion para informar , hemos entendido que nosotros somos hoy por hoy el medio que dice la verdad neta sin sensura , maqullaje sin tapujos , aun que aveces nos enbargue el dolor ,es pore so que invitamos a todo aquel que tenga en su poder una camara fotografica o una computadora para que la use en favor de la causa y mediante ello vierta la verdad de lo que pasa en mexico y use en las redes sociales para ese fin ,solo de esa manera el pueblo de mexico y la comunidad internacional estara verdaderamente informada . hagamos ese periodismo desde abajo en cada Pais , en cada ciudad y Rincon de mexico .
Mexicanos en la ciudad de New York
New york city 9 oct 2014

Iguala, #Ayotzinapa; tormenta política y crisis social en México.

 La cuenta atrás se ha acelerado en México. El descubrimiento de otras cuatro fosas clandestinas en Iguala y las nuevas confesiones de sicarios van despejando las últimas dudas sobre el paradero de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos. Todo está listo para estallar. Solo falta la confirmación oficial de que los cadáveres calcinados y enterrados de mala manera en las afueras de la pequeña ciudad de Guerrero pertenecen a los alumnos de magisterio detenidos por la Policía Municipal la noche del 26 al 27 de septiembre tras una salvaje persecución que acabó con seis muertos y 17 heridos. Pocos dudan de este desenlace, pero mientras llega, el país asiste a una oleada de consternación sin precedentes en el mandato del presidente Enrique Peña Nieto.

A las multitudinarias manifestaciones de los padres y compañeros de los estudiantes, amparadas en una fortísima marea de solidaridad, han seguido las exigencias de organizaciones internacionales, entre ella la propia ONU , para que se resuelva con celeridad el caso. Los nubarrones han adquirido un color político oscuro. Intelectuales y empresarios se han sumado al malestar. Y han apuntado al corazón del problema: la incapacidad de las fuerzas de seguridad de domar la violencia, lentas y torpes a la hora de detener a criminales que se permiten secuestrar y hacer desaparecer estudiantes por decenas.

El Gobierno, consciente del terremoto que se avecina, se ha puesto manos a la obra. El pasado lunes el propio Peña Nieto, en un mensaje televisado, se mostró “indignado” por los hechos y anunció que no dejaría el más mínimo resquicio a la impunidad. Acto seguido, envió a la Gendarmería, la nueva fuerza de choque contra el narco, a tomar el control de Iguala. El mismo camino siguió el director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, el hombre que capturó a El Chapo Guzmán, el narcotraficante más buscado del planeta. Pero estas medidas no han logrado calmar los ánimos.

El presidente, una figura que en México suele planear por encima de los vendavales cotidianos, ha tenido que insistir otra vez en que los culpables caerán y que nada le torcerá el pulso en su persecución. “Tenemos que ir en profundidad y, paso a paso, llegar hasta los responsables, aquellos que por negligencia o por su actuación permitieron que esto ocurriera y que lamentablemente, de confirmarse, permitieron que perdieran la vida jóvenes estudiantes. Se trata de un hecho verdaderamente inhumano, prácticamente un acto de barbarie, que no puede distinguir a México”, ha declarado Peña Nieto. A sus palabras se han sumado, en rigurosa cadena, las más altas instancias de la seguridad mexicana. Uno tras otro, han intervenido para mostrar el denuedo gubernamental en la resolución del caso.

El volcán, pese a esta movilización oficial, no ha dejado de humear. La onda expansiva generada por la desaparición de los muchachos, de extracción humilde, las imágenes de sus padres destrozados y la cólera de numerosos intelectuales y amplios sectores sociales amenaza con traspasar los diques de contención y alcanzar la fibra más sensible y mimada del Ejecutivo: la economía. Hasta el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, poco dado a tratar sobre cuestiones de seguridad, ha advertido públicamente que cualquier percepción negativa sobre México puede afectar la atracción de capital, el principal empeño de esta Administración.

El escándalo por el secuestro y más que posible asesinato de los normalistas no nace solo, sino que recoge un malestar previo, difuso, pero amplio, del que ya dio aviso la llamada matanza de Tlatlaya. Una operación militar contra el narco, en la que a finales de junio murieron 22 personas. La sangría se presentó a la opinión pública con una inverosímil versión, que sostenía que las muertes habían sido fruto de un enfrentamiento a tiros. El relato fue avalado, pese a sus innumerables contradicciones, por la escala completa de autoridades encargadas de la investigación oficial. Toda esta defensa saltó por los ares cuando, gracias al testimonio de una superviviente, se descubrió que los militares habían matado a sangre fría a 21 de los supuestos narcos. Este brutal episodio de la guerra sucia, aunque fue sancionado con una fulminante reacción presidencial, que condujo al encarcelamiento de los militares implicados, abundó en la erosión que sufren los responsables de la seguridad. A esta desconfianza se ha añadido la raquítica reacción política en el propio estado de Guerrero, gobernado por Ángel Aguirre, un dinosaurio de modos caciquiles durante cuyo mandato el territorio ha caído bajo el imperio del narco, convirtiéndose en el más violento de México. Su resistencia a abandonar el cargo ha aumentado la tensión, enlodado a su propio partido, el PRD (izquierda), y catapultado la sensación de que nada ha cambiado.

En esta olla a presión, las investigaciones avanzan con exasperante lentitud. De momento, la procuraduría ha detenido bajo la acusación de homicidio a 34 personas, entre policías municipales y sicarios (indistinguibles en muchos casos). Pero ninguno de los arrestados dejan de ser más que peones de un juego mayor y oscuro. Los autores intelectuales siguen libres. Tanto el alcalde de Iguala como el jefe de la Policía Municipal están en paradero desconocido. En el caso del regidor, cuyos vínculos familiares con el narcotráfico emergen día a día con más claridad, se ha descubierto, para mayor escándalo, que goza de un blindaje judicial, concedido por un magistrado federal a los dos días de los hechos. Esta salvaguarda reafirma su aforamiento e impide detenerle hasta nueva orden. Tampoco ha caído ningún cabecilla del sanguinario cartel de los Guerreros Unidos, la organización que controla Iguala y cuyos sicarios, en connivencia con la Policía Municipal, dieron muerte, según las confesiones de dos detenidos, a los estudiantes, que simplemente se habían apoderado de tres autobuses y reventado un acto de la esposa del alcalde. Una demostración de poder enloquecida y criminal que aún no ha sido sancionada. La cuenta atrás no ha terminado.
 
De: El País.